Pamela Rodríguez
Hoy tuvimos el placer de recibir en nuestro estudio a la cantante y actriz Pamela Rodríguez, que está presentando su segundo disco, “Me quedo en Buenos Aires”.
SHOW ACÚSTICO: Sábado 19 de Marzo, 21:00 horas, con Pamela Rodríguez, Arito Rodriguez y Juanpi Borrini; en «IL TEATRINO», Boulevard Saenz Peña 1376 (Tigre).
Reservas: ilteatrino.reservas@gmail.com / (011) 4749-6987.
Pamela, quien se destacó en la tira televisiva Gasoleros (entre otras series de televisión), y que también supo poner sus coros en varias giras de Pappo, propone en su segundo álbum de estudio un recorrido musical con canciones más reflexivas y maduras, referidas a experiencias de vida.
Segundo disco de la cantante, que rodeada de amigos y colaboradores como Gabriel Carambula, Nelson Pombal, Bolsa González, Claudio Marciello y Chucky de Ipola, plasma una serie de canciones que van del rock stoniano al pop más elaborado.
El disco fue producido por Álvaro Villagra y Nelson Pombal, un joven productor que ya trabajó con Guasones y bandas rockeras como Rock a la Orden y la 25; que además coprodujo el último álbum de Palito Ortega.
El disco se inicia con la canción que le da el título y es puro rock stoniano, con la voz de Rodríguez con cierto tono a dejadez, bien conducida por la guitarra eléctrica del Tano Marciello que mete un solo notable. Nico Rafetta adornando la canción con un Hammond y un piano.
«No queda tiempo» es un suave boggie en el que los punteos de la guitarra de Carambula navegan envueltos en los arreglos de Hammond que metió Chucky de Ipola, a los que se suman los arreglos de pedal steel guitar de Ariel Lobos, para que la canción no pierda su raíz rockera.
«Punto extremo» es una linda balada con toques bluseros que surgen de la guitarra de Carambula, mientras Pamela la canta en un tono gastado, como grabado de madrugada, luego de una larga noche.
«Es todo amor» la tiene a Pamela tocando la mandolina y la guitarra, arreglos de un corno francés, Nico Rafetta con el Hammond y el Bolsa González cerrando el concepto desde la batería para darle a la canción un aire Beatle. Una canción que parece hablar del mayo francés de 1968, pero también de amores que se dieron durante el levantamiento popular en la Argentina en diciembre de 2001. De besos y caricias robadas entre gases lacrimógenos y cargas de la asesina caballería de la Federal.
El existencialismo toma un camino rockero sucio de la mano de «Gurdjieff» que lo tiene a Carambula sacándole chispas a la guitarra, hasta que la voz de Rubén Rada le da un color hermoso a la canción, que deja de ser un funky de New Orleans y se convierte en un candombe con el uruguayo haciéndose cargo del tambor chico, el repique y un piano.
«Muerte lenta» es una balada bien rockera, cargada de dolor, sufrimiento y autocrítica, mientras que «Todo sobre mi» es un medio tempo dulce y suave, bien conducida por las guitarras de Carambula y Pombal, mientras Nico Rafetta y Chucky de Ipola se reparten los arreglos de Hammon y el piano Rhodes.
«Querido amigo» es un rock sureño a tres guitarras, con un gran trabajo de Rodríguez en la voz y con el Bolsa como timonel desde la batería. «Coctel de emociones» es un funky con aire de música disco y jazz y muy buenos arreglos de bronces. En mitad de su trayecto la canción se vuelca al Río de la Plata conducida por Daniel Maza, que la timoneó desde su bajo y luego se pasa al tambor repique.
Maza junto a Rada se hacen cargo de meter al Barrio Sur, al Cerro y a Malvín en el «Candombe del Recuerdo», donde se suman otros percusionistas para un ritmo rico y cadencioso. Pamela Rodríguez le pone mucha emoción a la canción, que recuerda a los trabajos de la multifacética Egle Martin en los años 70.
El álbum se cierra con la emocionante balada «El Pacto» con el tano Marciello arrancándole lágrimas y dolor a la guitarra, secundado por Maza en el bajo, arreglos de cuerdas y la participación de un corno francés.
Conducción: Milagros Aguirre Durá – Brenda Bocchigliere
Producción: Diego Tomasi
Operación: Carlos Santoro